Cortinas de Baño Bordadas

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Cortinas de baño o ducha de tela bordada.

No caigas en la idea de que la decoración del baño es menos importante que la de otras estancias de la casa, dale personalidad e intégralo en el proyecto decorativo de tu hogar. Unas cortinas bordadas le darán a tu baño un toque elegante y distinguido, además de cumplir a la perfección con su cometido práctico. Nuestras cortinas de baño bordadas están confeccionadas con tejido de loneta (algodón y políester) de gran calidad, en el que además aplicamos un tratamiento antimoho y de hidrofugado para que puedan repeler completamente el agua.

Cortinas de baño de tela de ATENASCASA: todas las prestaciones que necesitas para hacerte la vida un poco más fácil.

Tratamiento hidrófugo: repele el agua y protege el tejido de las cortinas.

Nuestras cortinas de baño de tela están fabricadas con tejidos como el algodón o el poliéster que de por sí no repelen el agua. Evidentemente el objetivo principal de una cortina de ducha es que el agua no termine por salpicar el resto del baño o que al menos salpique lo menos posible. Por este motivo necesitamos tratar la tela para acercar su coeficiente impermeable al 100%. Para ello aplicamos sobre la misma un tratamiento de hidrofugado que garantizará un alto nivel de estanqueidad mientras protege el tejido de la humedad repeliendo el agua.

Diseño y durabilidad.

Una de las características principales de estas cortinas de tela es que tienen un aspecto elegante, son suaves, y están pensadas para encajar de forma armoniosa con el aspecto de tu baño. El material también tiende a durar mucho tiempo, de esta forma solo deberás lavar las cortinas de baño según las indicaciones para tener de nuevo un producto que luce casi como el prier día.

Facilidad de limpieza.

Una de las ventajas principales de las cortinas de tela es la facilidad para lavarlas. Al estar en nuestra ducha o bañera, con las cortinas de baño debe seguirse una estricta higiene para evitar que aparezcan humedades o moho. Es recomendable evitar que les de el sol directamente para que no pierdan color ni se vean afectadas sus propiedades. Pueden limpiarse con agua y lejía, utilizando la lavadora, con bicarbonato o incluso con vinagre.